PORQUE DIOS ME AMA. 1 Corintios 13:4-8
Porque Dios me ama, es lento en perder la paciencia conmigo.
Porque Dios me ama , tiene en cuenta las circunstancias de mi vida, y las usa en forma constructiva para mi crecimiento.
Porque Dios me ama , tiene en cuenta las circunstancias de mi vida, y las usa en forma constructiva para mi crecimiento.
Porque Dios me ama, no me trata como un objeto para ser poseído y manipulado.
Porque Dios me ama, no necesita producir la impresión en mi de que es grande y poderoso, porque El es Dios, ni me da poca importancia como hijo suyo, para
mostrarme lo importante que El es.
Porque Dios me ama, esta a favor mío. Quiere verme madurar y crecer en su amor.
Porque Dios me ama, no me hace sentir su ira a cada pequeña equivocación que hago, y hago muchas en realidad!
Porque Dios me ama, no lleva la cuenta de todos mis pecados y luego me machaca con ellos siempre que tiene oportunidad de hacerlo.
Porque Dios me ama, esta profundamente apenado cuando no ando por los caminos que a El le agradan, porque ve esto como evidencia de que no confió en El, ni le amo como debiera.
Porque Dios me ama, se regocija cuando experimento su poder y fuerza, y resisto las presiones en la vida, por amor a su nombre.
Porque Dios me ama, sigue trabajando conmigo pacientemente, incluso cuando yo estoy a punto de renunciar a seguir adelante y no me hago cargo de que El esta dispuesto a seguir adelante conmigo.
Porque Dios me ama, sigue confiando en mi, cuando a veces, ni siquiera yo, confió en mi mismo.
Porque Dios me ama, nunca dice que no hay esperanza para mi, al contrario, sigue trabajando pacientemente conmigo, me ama y me disciplina de tal forma, que me es difícil comprender la profundidad de su interés en mi.
Porque Dios me ama nunca me abandona, aun cuando muchos de mis amigos puedan hacerlo.
Porque Dios me ama, permanece conmigo cuando me he hundido en el cieno de la desesperación,cuando veo mi realidad y la comparo con su justicia, santidad, hermosura y amor. Es,
en un momento como este, que puedo realmente creer que Dios me ama.
¡Si, el mayor de todos los dones, es el amor perfecto de Dios!