Muchas veces cuando estamos en épocas de aflicción nos hacemos la pregunta ¿Dios se olvidó de mí? de nuestras circunstancias pasamos momentos de soledad o de angustia cuando buscamos de todo para nuestra tranquilidad personal y no la hayamos, a todos nos ha pasado eso cuando vemos los días grises donde las situaciones se tornan más duras y no tenemos escapatoria donde recurrimos a personas que en vez de ayudarnos nos terminan aconsejando de forma equivocad.
Muchas veces nos dedicamos a tomar salidas irreparables como la autodestrucción, droga alcohol, sexo, etc. Pero lo más recomendable es lo siguiente la receta perfecta para poder liberar tensiones y limpiar el alma es acercarse a Dios poner nuestra confianza y circunstancias en él, no pensemos que Dios se olvidó de nosotros .Hay una Dadiva de los filipenses en Filipenses 4 -10:20 donde puedes comprobar que Dios suple nuestras necesidades de acuerdo a su amor. Dice: En gran manera me goce en el señor de que ya al fin habéis revivido vuestro cuidado en mí;
De los cual también estabais solícitos, pero os falta oportunidad.. No lo digo porque tenga escasez, pues he aprendido en contentarme cualquiera que sea mi situación. Se vivir humildemente y se tener abundancia; en todo y por todo estoy enseñado, así para estar saciado, como para tener hambre, asa para tener abundancia como para padecer necesidad. Todo lo puedo en cristo que me fortalece;
De los cual también estabais solícitos, pero os falta oportunidad.. No lo digo porque tenga escasez, pues he aprendido en contentarme cualquiera que sea mi situación. Se vivir humildemente y se tener abundancia; en todo y por todo estoy enseñado, así para estar saciado, como para tener hambre, asa para tener abundancia como para padecer necesidad. Todo lo puedo en cristo que me fortalece;
Decir todo abarca en su magnitud todo lo que podamos hacer de forma positiva en nuestras vidas edificarnos en el nombre de Dios, salir de situaciones económicas en el nombre de Dios cancelara enfermedades ,en el nombre de Dios porque Dios te da la autoridad de poder hacer todo en el nombre de él.
Mi Dios, Pues, suplirá todo lo que me falta conformé a sus riquezas en gloria de cristo Jesús. Al Dios y padre nuestro se a la gloria por los siglos de los siglos Amen.
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